"La Llegada". Poema de Jorge Alonso Curiel sobre la ansiada primavera
Hay ganas de primavera. Hay ansias de renacer. Por eso, un poema sobre ello. La Llegada Por Jorge Alonso Curiel No duda el hombre herido al avanzar por la naturaleza renovada, por la primavera maestra de júbilo, en el olvido de las sombras que se convirtieron en pasajeros de vagones que no conciben extraviarse, en el resurgir de la vida en los campos, en el mundo. El hombre herido deja tras de sí ya solo huellas en las que florecen los frutos amables y coloridos de la esperada estación del aire claro, de los días en los que el refugio se encuentra en cualquier esquina, y todo es ilusión, y el pasado no existe. No existen, no, ni las llagas ni el resquebrajamiento final de las almas rotas, ni la aparición que nublan los ojos de las tormentas tan oscuras como noches en las que cualquier atisbo de esperanza es un sueño incumplido. El regreso de la vida al mundo es la oportunidad para los extranjeros eternos de la existencia, para los luchadores que han perdido el destino y no co