HACE UNOS MESES , sería por marzo, se despertó en mí la necesidad de mirar lo andado, de repasar lo vivido, y escribir sobre ello. A mis 49 años siento esa necesidad de recordar y reflexionar sobre lo que he vivido, como un primer intento de autobiografía que supongo escribiré dentro de algunos años, desde el último recodo del camino, si es que llego a él. Y lo estoy haciendo a través de capítulos breves, en apuntes autobiográficos líricos, llenos de evocación, que no siguen un orden cronológico, y en los que voy narrando todo lo que me ha hecho ser quien soy. No es una autobiografía al uso; es mi manera, en este momento, de mirar el pasado en este punto del viaje. He sentido esta obligación, este vértigo, y no sé por qué, pero no quiero tampoco intentar explicarlo. Pero en ello estoy poniendo negro sobre blanco las inquietudes de este ser hipersensible que ya desde pequeño no ha dejado nunca de buscar un refugio donde resguardarse de la compleja y asombrosa realidad que nos rodea. Un ...